Desde mi última entrada del mes de Junio no he pasado por aquí, así que hoy he decidido pegarme una vuelta y ver que se cuece. Me encanta ver que recibo un montón de visitas y además de lugares insospechados, aunque no soy yo de cegarme con esas cosas por que no es mi intención, me gusta compartir lo que hago y eso me hace disfrutar cuando veo que se cumple y que hay alguien que se pasa por aquí.
Bueno no me en rollo más jejeje....aunque esta entrada se trata un poco de eso, de en rollar.
Es un tipo de pan dulce creado en la década de 1920 en Suecia y Dinamarca y solo era horneado en hogares con suficientes recursos económicos por el coste de los ingredientes. En la actualidad es una especialidad típica en EEUU y creo que ya conocida en todo el mundo.
Pero es de risa si os cuento por que me decidí a hacerlos hoy. Fuimos mi hija y yo a merendar a un sitio muy conocido por la zona y nos pedimos uno con toda la ilusión del mundo, pero cual fue nuestra desilusión, por que nos sirvieron un pastelillo triste, seco, duro y sin ningún sabor, desde luego informé de la calidad del bollo a la camarera educadamente.
Aunque yo no soy repostera profesional ni por asomo, me dolió en el alma que me pusieran algo así. En fin que le dije a mi hija... no te preocupes que nos comeremos un buen Cannel Rolls pronto, así que aquí los tenéis... y son tan sencillos. Tengo que decir que el café estaba bueno jajaja
Ponemos en un bol los ingredientes secos, 400 g de harina de fuerza,30 g de azúcar, media cucharadita de cardamomo molido ( si no tienes puedes poner vainilla en los líquidos) y pizca de sal. Sobre eso echaremos 1 huevo,100 ml de leche,50 g de mantequilla derretida sin sal, 50 ml de agua templada en la que habremos disuelto 8 g de levadura fresca.
Removeremos bien con una cuchara, dejaremos unos 15 minutos tapado y pasaremos al banco para amasarla 10 minutos, serán suficientes, hasta que la masa esté completamente lisa, elástica y que no se nos pegue a las manos.
Así la taparemos bien y dejaremos que doble el volumen. os voy a decir lo que hice yo, por que me gusta hacerlo así, cuando casi haya doblado el volumen la tapo muy bien y la meto en la nevera así estará hasta el día siguiente y con esta fermentación lenta el la masa cogerá todos los sabores de los ingredientes, así también utilizamos menos levaduras. Si lo quieres hacer para el mismo día tendrás que poner unos 15 g de levadura.
Y seguimos. Cuando haya doblado el volumen hayas escogido un método u otro en el banco la aplanaremos con un rodillo hasta hacer un rectángulo de 5 mm de grosor lo mejor que podamos. Y empezaremos a untar la masa con nuestro relleno.
En un bol haremos una mezcla con 80 g de mantequilla fundida, 2 cucharadas de canela y 60 g de azúcar integral, panela o morena y así hasta gastarla toda.
El siguiente paso será en rollarla de esta manera y con mimo.
Así estaría bien. Fácil no?
Es una masa bastante agradecida y fácil de trabajar.
Pero aunque es fácil de trabajar, sigue siendo una masa blandita, así que para cortar los Cannels lo haremos con un hilo que pasaremos por debajo del rulo haciendo un nudo y apretándolo, veréis que fácil y que bien quedan.
Directamente a nuestra bandeja con papel sulfurizado bajo para que no se nos peguen.
Horneamos a 190 grados unos 15 minutos, según horno.
Ufff....os aseguro que nada más sacarlos del horno tendréis la tentación de comeros uno.
Pero si tenéis paciencia como realmente los disfrutarás será con su glaseado.
Mezclaremos bien con una varillas 100 g de azúcar glas, una cucharada de queso crema y 30 ml de leche, si lo echamos cuando aún están calientes....ni os cuento.
Estos si que estaban buenos.
Hasta muy pronto.💗
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